Un aplauso de despedida para Amelia Bence, icono de la época de oro del cine Argentino.
La actriz de los ojos más lindos del mundo murió, ayer, a los 101 años; sus restos serán depositados en el Panteón de la Asociación Argentina de Actores, en el Cementerio de la Chacarita.
Bence, que según su testimonio había nacido el 13 de noviembre de 1914, fue una de las más destacadas figuras que dio el cine y el teatro en la Argentina entre las décadas de 1940 y 1960 y después de ese momento de apogeo se mantuvo siempre activa y prolongó su vigencia a fuerza de talento y personalidad.